martes, 25 de marzo de 2008

Fotos que hicieron historia (6)

La niña afgana

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Sharbat Gula fue fotografiada cuando tenía 12 años por el fotógrafo Steve McCurry, en junio de 1984. Fue en el campamento de refugiados Nasir Bagh de Pakistán durante la guerra contra la invasión soviética. Su foto fue publicada en la portada de National Geographic en junio de 1985 y, debido a su expresivo rostro de ojos verdes, la portada se convirtió en una de las más famosas de la revista. Sin embargo, en aquel entonces nadie sabía el nombre de la chica. El mismo hombre que la fotografió, Steve McCurry realizó una búsqueda de la joven que duró 17 años. El fotógrafo realizó numerosos viajes a la zona hasta que, en enero de 2002, encontró a la niña convertida en una mujer de 30 años y pudo saber su nombre. Sharbat Gula vive en una aldea remota de Afganistán, es una mujer tradicional pastún, casada y madre de tres hijos. Ella había regresado a Afganistán en 1992. Nadie la había vuelto a fotografiar hasta que se reencontró con McCurry y no sabía que su cara se había hecho famosa. La identidad de la mujer fue confirmada al 99,9% mediante una tecnología de reconocimiento facial del FBI y la comparación del iris de ambas fotografías.

 


Un antes y un después

Sharbat Gula fue nuevamente fotografiada en 2002 como se puede apreciar en la fotografía comparativa de ambas instantáneas.

 antes y despues 1984-2002


El fotógrafo: Steve McCurry

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Nacido en Philadelphia en 1.950, McCurry está considerado uno de los mejores fotógrafos del mundo.
En 1.984 fue ganador del premio al mejor fotógrafo por la Asociación de Fotógrafos de Prensa.
Autor de varios libros, destacan:

The Path to Buddha: A Tibetan Pilgrimage Phaidon Press Limited, 2003
Sanctuary Phaidon Press Limited, 2002
South Southeast Phaidon Press Limited, 2000
Monsoon Thames and Hudson, 1995
Portraits Phaidon Press Limited, 1999
The Imperial Way Houghton-Mifflin Company, 1985

Colaborador habitual de National Geographic y de numerosas publicaciones fotográficas, el reconocimiento le llegó de la mano de la que fue su mejor fotografía.
Fue en 1984 cuando realizó la toma: el rostro de una muchacha afgana en el campamento de refugiados de Nasir Bagh en Peshawar (Pakistán).
Los ojos de la chica dieron la vuelta al mundo en la que fue la portada más sonada de National Geographic.

Diecisiete años después, McCurry quiso averiguar qué había sido de la chica, de la que no conocía ni su nombre, por lo que decidió volver a la región fronteriza entre Afganistán y Pakistán .
Era su última oportunidad de localizarla, pues el campamento de refugiados sería cerrado.
Para identificar con seguridad a la chica en caso de encontrarla se ha procedió a escanear el iris de sus ojos a partir de la fotografía.

Acompañado en su búsqueda por Rahimullah, un importante periodista del país, sólo obtenía falsas pistas, mujeres con un sorprendente parecido físico, rumores de que falleció a los trece años de edad a causa del parto de su primer hijo, ...
Desalentado regresa a Estados Unidos, aunque dejando a Rahimullah continuar con la búsqueda.

Rahimullah encuentra a un hombre que asegura ser el hermano de la muchacha de la foto, así que junto a Boyd Matson, compañero de McCurry, se presentaron en su casa.

Afortunadamente lograron obtener el permiso del marido y de sus tres hermanos para hablar con ella y verla, pero con el rostro oculto tras un velo.
Ya sabían su nombre: Sharbat Gula.
La periodista Carrie Regan, encargada de hablar con ella y hacerle unas fotos, dijo de su entrevista con la refugiada que pertenecía a la etnia pastún, casada y con tres hijas. Se desconocía su año de nacimiento,pero calculaba que tenía alrededor de 30 años.

Finalmente,tras la autentificación del iris e investigaciones del FBI, se llega a la conclusión que se trata de la misma persona, por lo que Steve McCurry se desplazó inmediatamente a Pakistán, donde se produjo el encuentro entre ambos.

Autorizado a volver a fotografiarla,las nuevas imágenes de Sharbat muestran el deterioro causado por el paso del tiempo debidas a la marginación propia de su sexo y las penalidades de ser una refugiada.

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