viernes, 14 de marzo de 2008

Cartas a un joven periodista (2)

FECHA DE LA CARTA: 15 de julio

20070715040521-kellermanm2775ecl-copyNo sea usted así, Juan Luis, que si Honorio quiere consejos es porque es un inexperto en el campo donde usted es todo un profesional. No se cierre en banda negándole al chaval la osadía de poder pedirle consejo alguna vez.

Tal vez Juan Luis lleve razón Honorio, no tienes el nombre más adecuado para triunfar en la vida. Con ese nombre no te veo yo firmando artículos en diarios importantes. Tal vez debas meditar y pensar en buscar un seudónimo más apropiado.

Ahora llegamos a lo que realmente nos importa, ¿deberías obtener un título de periodismo para ejercer? La respuesta por mi parte es clara, pienso que sí, pero también pienso que ese título debe ser complementario de la formación genérica a nivel de conocer el mundo donde vivimos. La verdad es que el intrusismo ha hecho, y sigue haciendo, mucho daños al periodismo y quizás por este motivo se exija titulación en muchos medios hoy en día. A quien no le da importancia al título le tengo que recordar que ese papelito es formación, formación que se ha obtenido con sacrificio y que va a servir mucho a la hora de trabajar.

Otra cosa es el nivel requerido en la Facultad de Comunicación e Información donde se imparta la carrera, pues todos sabemos que en algunas universidades es más fácil que en otras. Luego está la cuestión de saber si es realmente necesario y útil estudiar teología para ser "bueno".

Y más específicamente, me pregunto si algunas asignaturas que estudio como troncales son realmente más importantes que otras que hago como complementos de formación u optativas. Supongo que cada maestrillo tendrá su librillo.

"Así que, Honorio, sé fiel a tí mismo y administra silencios y palabras sin otra regla que la de la verdad y la del bien público, sin más limitación que la del respeto a la libertad y el derecho de los otros. Hablar es un privilegio de todo ciudadano libre, no de los periodistas que tienen un carné, licencia o diploma. La libertad de expresión no es nuestra, sino de nuestros lectores".

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