martes, 21 de octubre de 2008

Prensa Local

Hablamos de la prensa local, y nos ceñimos a la Región de Murcia.

Concretamos aún más. Seguro que saben a qué diario nos referimos. Sí, cuando hablamos de prensa periódica diaria en la Región de Murcia, inevitablemente lo relacionamos con el periódico La Verdad, un diario centenario, consolidado, que comenzó su andadura en marzo de 1903 y que perdura todavía en el tiempo, con pequeñas vicisitudes.

Su fortaleza ha sido y es tremenda. Consideramos más de un siglo de historia, de existencia hermosa y florida, que no pasa inadvertido para los profesionales del periodismo y que nos invita a explicar las razones de su éxito, ya que, como todos sabemos, el diario La Verdad, encabeza el primer puesto en difusión, en penetración y en ventas a nivel regional.

También es una publicación informativa y gerencialmente emblemática en nuestro país. Son muchas las razones, los motivos, las vivencias, que sustentan la fortaleza del periódico. Sin duda, tratar de resolverlas todas nos llevaría más tiempo y espacio del que tenemos ahora.

Intentamos, no obstante, dar pinceladas fundamentales y fundamentadas. Las iremos viendo en este pequeño recorrido en forma de artículo.

Por ello, y en primer término, consideramos oportuno, y básico, referirnos a la historia reciente del diario, que no es otra sino aquella comprendida entre 1988 y 2007, como etapa fundamental en la evolución del periódico, con características propias como la controversias de diversa índole, los avatares políticos y el mayor desarrollo tecnológico producido dentro y fuera de nuestras fronteras, en todo el mundo desarrollado, todas ellas razones de peso, y que sin duda, han transformado el diario, convirtiéndolo en el presente como referencia y en el futuro como guía de los medios regionales.

Las pausas, las pautas, los ritmos han sido buenos. Si los analizamos en el transcurrir de estas dos décadas, no podía ir mejor. Estos últimos veinte años para el diario han estado marcados por su pertenencia al actual grupo Vocento, una corporación que le ha permitido encaminarse hacia nuevas formas de hacer periodismo, situándolo a la cabeza de la prensa escrita moderna en la Región de Murcia y llenando de perspectivas el futuro inmediato.

La calidad del periódico en cuestión es testimonio de lo bien que se han hecho las cosas. El gran salto de lo que siempre ha sido un buen trabajo periodístico regional ha venido de la mano del empuje de Vocento. Los mismos cambios, sucesivos algunos, en la tipografía, en la fotografía, en los tipos de noticias, en los espacios y sus repartos, etc. están originados y motivados por su pertenencia al grupo citado. Su progresiva mejora y mudanza han convertido a este periódico en un ejemplo a seguir.

Los cambios de los que hablamos y a los cuales el periódico La Verdad ha tenido que someterse, al igual que otros muchos de sus mismas o parecidas características, se traducen en el buen aspecto, en la magnífica salud, que ostenta hoy el diario, entendiendo como tales los aspectos formales, los visibles, los materialmente más palpables, que estructuran las páginas de cualquier periódico y, más concretamente, sus portadas.

A ellas nos hemos referido, y en ellas nos hemos detenido. No podía ser de otro modo, en ésta primera aproximación. No olvidemos que el rostro de una publicación es lo primero que vemos, es decir, la portada, que suele decirnos muy mucho de lo que vamos a hallar en el interior de la misma. Es, cada día, esa puesta de larga, la que nos brinda el menú informativo, formativo y de ocio y entretenimiento. Es fundamental conocer, con un simple vistazo, lo que un periódico puede ofrecernos, lo que pretende de sí mismo y de nosotros, y para ello hemos realizado un análisis exhaustivo de las portadas del diario La Verdad, atendiendo, como criterio de funcionamiento, muy operativo a nuestro juicio, la consideración de una página por mes durante los últimos veinte años, y escogiendo aleatoriamente los días, con el objetivo de ser lo más fieles que hemos podido a la realidad del medio.

Hemos querido ser lo más asépticos que hemos podido.

Estamos convencidos de que hay más fórmulas de estudio, de acercamiento a la realidad periodística de un medio en concreto. Ésta es una de las posibles, la que se basa en una mirada a su primera página, la que antes se llamaba primera plana, que nos indicará (al menos, eso pensamos) cuáles son los principios editoriales de la empresa que sostiene económicamente, informativamente también, a un diario que es símbolo de la Prensa en la Región de Murcia.

El resultado de nuestro análisis se traduce, como punto de partida, en 240 páginas analizadas, de las que se desprenden las siguientes conclusiones.

Resaltemos que la cabecera es el principal y quizá el más llamativo de los cambios que ha experimentado la estructura del diario. En ella hemos observado transformaciones en el estilo de letra, en el tamaño y en el grosor. Todos ellos han contribuido a modernizar la cara más visible del diario, otorgándole los rasgos necesarios para ser lo que ha sido siempre, un gran periódico, de influencia, moderno, capaz de adaptarse a los nuevos tiempos a la mayor brevedad y de la mejor de las maneras. La visión que tenemos del periódico nos viene de este frente, por así decirlo.

Pero ha habido otros muchos cambios dentro de la cabecera, correspondientes a la fecha, el ámbito geográfico que abarca el diario, el nombre del director, el precio y sin duda un espacio reservado para los grandes momentos como los aniversarios cumplidos. Todo ello, como decimos contribuye al buen funcionamiento del periódico, principalmente, porque cualquier modificación que hayamos observado corresponde a los cambios internos que ha sufrido el diario y esos cambios, son los que le han permitido crecer y establecerse de forma segura dentro de su ámbito de influencia.

Cada director ha querido dejar su impronta en el único diario centenario de la región y en buena parte, esas mejoras son las que se desprenden de dicho análisis.

Sin duda, otro de los grandes protagonistas de la portada del diario es la parte gráfica del mismo. Aquí hemos observado grandes modificaciones, que se han transformado en mejoras sustanciales para el periódico.

La utilización de la fotografía como elemento imprescindible de la portada, así como el uso de infografías, de filetes, de sumarios, la reducción de textos a favor de titulares, que adelantan los temas más destacados de la jornada, como el hecho de no ceñirse a noticias meramente regionales, sino todo lo contrario, la incursión de noticias de ámbito nacional e incluso internacional en la portada del diario, le han dado una categoría muy por encima de la reservada a un periódico regional. De ello, queda constancia en la difusión y audiencia del medio con respecto a otros de las mismas características.

El empleo de cualquier soporte gráfico le ha beneficiado tanto a la hora de distribuir la página como a la de ordenar las informaciones, marcando el espacio reservado a cada una de ellas, procurando aligerar la carga informativa, mostrándola ágil, ligera, clara y contundente en su desarrollo. Este hecho ha propiciado, igualmente, el poder disponer de muchas informaciones poco desarrolladas en la página principal, ya que su distribución y ordenación en el espacio no permite ningún tipo de equívoco por parte del lector, que se siente ayudado a consumir la información que se le ofrece.

Otro de los elementos que conforman la portada de un diario, como todos sabemos, es la publicidad, en definitiva, la gran aliada de los medios de comunicación. Además, en este caso, es una de las publicidades más caras, si no es la que más. Gracias a ella, los medios pueden subsistir en un mercado cada vez más diversificado y competitivo. Sin embargo, en el diario, La Verdad, apenas encontramos publicidad en la portada en relación a lo que es en otro tipo de publicaciones.

¿Por qué? Las razones que se pueden dar como respuestas son diversas. Por una parte, el hecho de que el periódico no sea rentable o que base sus ingresos en otras fuentes; que al propio medio no le interese por política interna dedicar espacios muy extensos de publicidad en sus portadas, que son las que más credibilidad tienen; o bien que el espacio sea tan costoso, debido al buen funcionamiento de la empresa periodística, que las empresas publicitarias decidan escoger otras alternativas como son las páginas de interior.

No obstante, no nos corresponde a nosotros averiguar las razones de por qué sucede esto, sino llamar la atención sobre este hecho y cerciorarnos de que así es, como queda demostrado a lo largo de los sucesivos análisis que hemos realizado. Sí nos atrevemos a decir que las cuentas son tan saneadas en el caso de Vocento en Murcia, que La Verdad no precisa de vender lo mejor de sí misma, como es la portada, que tiene publicidad, sí, pero de manera comedida y seria, con mesura.

Por último, queríamos hacer referencia a otro de los puntos fuertes que sustentan las portadas del diario: nos referimos a las promociones, suplementos…Sin duda, el empleo de este sistema, sustenta los pilares del diario, ofreciendo al lector pequeños incentivos con los que atraer su atención. No olvidemos que la empresa periodística, es, ante todo, eso, una empresa. Por ello, recurre a cualquier sistema que atraiga la atención del lector para vender periódicos (vajillas, suplementos televisivos, cursos de inglés, descuentos y casi cualquier cosa que podamos imaginar son unos reclamos que incitan a comprar periódicos).

Pero no olvidemos que todo fin de conseguir una fuerte atracción viene motivado por otro más fuerte, el de fidelizar a la audiencia, es decir, que se sienta identificada y decida quedarse con nosotros por realizar, la empresa y sus profesionales, un buen trabajo, interesante, que responda y que cubra las necesidades informativas de cualquier ciudadano. En definitiva, no descubrimos nada, si decimos que cualquier empresa periodística está motivada por la venta de su producto, lo que no resta en paralelo, el hecho de que, a pesar de la competitividad y del gran mercado en el que se mueven, el factor fundamental de cualquier medio debe ser, ha de ser, y es, producir el mejor producto posible para sus lectores y, sobre todo, para aquellos que son, o deban ser, potenciales.

Para terminar, tan sólo destacar los puntos fuertes en los que se ha basado este trabajo y de los que estamos meramente convencidos de que son los pilares de cualquier diario y de los que especialmente el periódico La Verdad ha sabido dar buena cuenta, esto es, la cabecera, los aspectos gráficos y la publicidad, así como las promociones, que se han convertido, que se convierten pues, en el baluarte de este diario murciano. Ello, unido a la calidad del producto, dan como resultado cien años de historia, y los que estamos convencidos que quedan por venir.

El análisis expuesto es un primer acercamiento por nuestra parte a este periódico. Seguiremos avanzando en nuestra profundización, al tiempo que iremos contextualizando a esta empresa en Murcia y al resto de diarios de este grupo, de Vocento, en aras de ver la relevancia efectiva que tiene en el panorama nacional, y, si cabe, internacional.

--
Publicado por jtomas@um.es para CONFESIONES A LA LUNA Y A LAS ESTRELLAS (BLOG DE JUAN TOMÁS FRUTOS) el 17/10/2008

No hay comentarios: